En ella nos encontramos a la nueva Liga de la Justicia Oscura (chúpate esa Universal) en medio de un pueblo de Texas al que da el nombre el título de la serie y que cuenta con un vampiro, un magistral Peter Mensah (300), un ángel, una bruja virgen, virgen sí y eso va a ser importante, una asesina a sueldo, un mamporrero, una camarera, un gato parlante (ríanse de Gardfield que este minino le da mil vueltas), un cura que esconde una doble personalidad muy felina y un medium, el protagonista principal de la función, el señor Manfred interpretado por François Arnaud, al que conocimos en Blindspot.
Los diez episodios de la serie, basada en la obra de Charlaine Harris, la autora de True Blood, discurren en torno a las vicisitudes que sufren los miembros de nuestro equipo ante entes sobrenaturales, teniendo como eje central la presencia de cierto demonio, al cual sólo veremos en el episodio final, pero su presencia es inquietante y latente desde el minuto uno de la serie y que responde al nombre de Colconar, cuyo único fin es atrapar a la bruja Fiji y el motivo...bueno el motivo no os lo spoileo que quiero que veáis la serie.
El caso es que el final de temporada ha conseguido que mi sed de sobrenatural no haya sido saciada del todo y quiero que tenga una segunda temporada, porque a pesar de lo que he leído de algún amiguete que la considera una True Blood de saldo, mi saldo, valga redundancia para con la serie, es más que positivo ya que considero que es una serie muy bien hecha y que sobre todo sabe a lo que juega y lo que pretende.
Nota DVAS: 8/10
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