Antes de comenzar mi
crítica de "Objetivo: Londres", dos
advertencias:
Número Uno: Esta crítica
contiene algún SPOILER,
no la leas si tienes previsto ver la película.
Número
Dos: Si tienes pensado ir a ver la película,
mi primer consejo es que, antes de entrar dentro de la sala de cine a
verla debes dejarte el cerebro fuera. Esto es puro entretenimiento,
nada más. Es como ver una de la saga "Fast & Furious"
(salvando las distancias of
course), la lógica hay que olvidarla
completamente.
El argumento de la película
nos sitúa 3 años después de lo acontecido en "Objetivo: La
Casa Blanca". Nuestro protagonista, Mike Banning, se
encuentra trabajando directamente para el Presidente de los Estados
Unidos como su principal guardaespaldas. Y en estos momentos hace
acto de presencia el primer cliché del film. Nuestro protagonista
está esperando un hijo de su amada esposa, por lo cual obtiene unos
dias de permiso del Presidente para poder estar al lado de su mujer
cuando ésta de a luz. Pero...¡que sorpresa! Algo inesperado ocurre
y estos dias de persimo quedan cancelados para acompañar al líder
del mundo libre a Londres, donde el primer ministro ha fallecido y
tendrá lugar su entierro, por lo que los líderes mundiales deben
acudir ipso facto.
Por supuesto el hecho de
que la mujer del protagonista esté encinta y éste deba marchar
raudo y veloz a una misión de última hora no es más que una excusa
perfecta para que el espectador empatice con la mujer y sufra lo
mismo que ésta cuando ocurren los inevitables acontecimientos.
Una vez en Londres vemos
que los terroristas son la puta hostia (con perdón, si hay alguien
sensible a los tacos que cambie lo leído por "la caña de
España", pero no queda tan bien), pues son capaces de saber
dónde, cómo y cuándo va a estar cada líder mundial en el momento
exacto para poder asesinarlos sin temor a equivocarse. Vaya, ni que
hubiese un topo entre las filas del MI6 para decirles a los
terroristas todo lo que deben saber.... ¿alguien ha dicho cliché
nº2?
Por supuesto la muerte del
Primer Ministro realmente ha sido programada para reunir a todos los
líderes mundiales y acabar con ellos de un plumazo. ¿Con Todos?
NO!!! Una pequeña aldea gala...esto... perdón... Vuelvo a
empezar... ¿Con Todos? NO!!! El Presidente de los Estados Unidos
cuenta con la protección de Mike "Leónidas" Banning que
reparte leches y disparos a tutiplén y consiguen salir con vida del
atentado programado.
Nuestro protagonista, el
Presidente y la Jefa de Seguridad consiguen escapar en helicóptero
pero desafortunadamente los terroristas consiguen derribarlo. Unos de
los 3 muere , ¿quié será? Oh! Si. También mueren los pilotos del
helicóptero pero, ¿a quién le importan?
Para adivinar quién muere sólo
hay que retroceder un poco en la película y nos lo dicen. ¿Cómo?
Muy fácil, en una conversación que tienen Mike y la jefa de
seguridad, ella le dice que por supuesto será la madrina de su
futuro hijo. Se nota que ambos se tienen un gran aprecio asi
que...¡¡BUM!!, esta tipa más adelante morirá.... ¡¡Y ya van 3
clichés!!!
Destacar que el momento
"Señor Presidente, nos van a alcanzar, prepárese" del
helicóptero es una de las escenas más brutales de la película,
genial.
Lo siguiente ya es también
lo de siempre. Presidente y guardaespaldas deben resistir entre las
calles de Londres el asedio de los terroristas, ayudados de
diferentes aliados que les echarán una mano para poder sobrevivir.
En esta ocasión se le ha
dado mayor protagonismo al Presidente, rol encarnado por el actor
Aaron Eckhart, al cual yo personalmente nunca olvidaré dando vida a
Harvey Dent/Dos Caras en "El Caballero Oscuro". Esta
decisión no me parece mala, pues forma un buen equipo y tienen
bastante química junto con Gerard Butler, aunque aqui se sabe que
quien se lleva el gato al agua es nuestro conocido actor de "300".
Pese a todos los clichés
de la película (yo sólo he nombrado 3, pero tiene muchos más), yo
personalmente me lo he pasado como un crío viendo repartir leña a
Butler durante todo el film. Si bien esta es menos bestia que su
antecesora si tiene escenas brutales, como ese plano-secuencia en las
calles de Londres con las ametralladoras como principales
protagonistas. Es un plano impresionante y tras el cual no sabes
quién está más cansado si los actores o el espectador.
Como siempre en este tipo
de películas, y como ya he mencionado al principio, la lógica debe
dejarse fuera de la sala y no hacerte preguntas como:
- ¿Cómo es posible que todos los terroristas tengan tan mala puntería y nuestros protagonistas tan buena? Aunque, espera, creo que en un momento dado una bala le da al prota... aunque, ¡bah! Seguramente sea superficial.
- Vale que los terroristas sabía que el Presidente Italiano iba a estar en la Abadía de Winchester... Vale que sabían que el Francés estaría en un barco en el Támesis... Pero, ¿cómo coj.. sabían que el Japonés iba a estar en un atasco en un puente que justo iban a volar?
La falta de sorpresas en esta
película es enorme, sin embargo lo compensa su duración (poco más
de minutos) y que no da un momento de respiro al espectador. Acción
sin parar. Explosiones acojonantes. Disparos. Peleas... ¡MOLA!
Por supuesto otro punto a
favor de la película es la aparición de Morgan Freeman, actor que
se nota que se va haciendo mayor por sus escasas colaboraciones en
film, las cuales últimamente se reducen a permanecer la mayor parte
sentado. Además de que algo que personalmente no me ha gustado es
que el actor de doblaje de siempre de Freeman lo han cambiado y eso
resta.
Poco más que decir sobre
el film, se trata de una peli de palomitas, para disfrutar y al salir
de la sala automáticamente olvidar. Si sabes lo que vas a ver te lo
pasas genial y a mi, si mantiene ese nivel, no me importaría ver una
"Objetivo: La Luna" o algo parecido, ¿os imagináis a Mike
Banning repartiendo en el espacio?
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