Otra semana más vuelve nuestra kriptoniana y a pesar de que el avance nos prometía emociones fuertes, me quedo algo decepcionado.
Por poner un ejemplo, toda la acción se acaba en el episodio en el minuto treinta y cinco...de un episodio de cuarenta y tres de duración y no me entendáis mal, se que la moda es que los superhéroes también tengan sus momentos emotivos, es decir que sean más humanos, pero realmente lo que están haciendo es pasarse de la raya y tomar un rumbo que como no lo corrijan, sigue el camino de lo que le estaba pasando a "Arrow".
En fin analicemos lo interesante, al menos para mí, que es el hecho de que por fin hacen su puesta en escena los "White Martian" y su objetivo es M`Gann , pero la sorpresa viene que quien la viene a buscar para llevarla de vuelta es su marido.
Lógicamente Hank y compañía no van a dejar que eso pase y la llevan a la DEO para protegerla...error, porque allí ya está el marido de nuestra marciana y no viene solo.
Las peleas dentro de la DEO, son brillantemente rodadas y con mucha espectacularidad, especialmente a lo que se refiere a la escena en la que J'Onn J'Onzz y M'Gann se enfrentan al marido de ésta, con un final bastante impactante, por así decirlo, puesto que a lo mejor no es la muerte que esperamos ver en este tipo de productos.
Para el final nos queda esa Kara con cara de pasmada al comprobar que Mon-El decide continuar su vida amorosa lejos de ella...si es que estas boberías no aportan nada a la serie señores guionistas, vale, puede que ser un "cuarenter" mis estereotipos de super heroinas estén anticuados, lo que creáis, pero yo nunca identificaré a "Supergirl" como una heroína llorona y mojigata, no, porque hemos de suponer que si te has de enfrentar a los mayores peligros del Universo, no puedes tener un corazón blando, si no como indica tu origen eres la "Woman of Steel", la mujer de acero y tu corazón debe ser frío y duro como el acero.
Por José María Molano
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