Si la semana pasada nos encontrábamos con la llegada del doble de "Black Canary", esta semana lo que nos trae el episodio es el intento de reclutar a la nueva "Black Canary".
Ha sido un muy buen episodio, sin peros, muy buen ritmo, constante, sin que decaiga, con unos flashbacks que cada vez ´son más reveladores de la "mutación" de Oliver, a lo que es en la actualidad, animados por la presencia de Talia Al Ghoul y en los que descubrimos un sadismo sin precedentes, en cuanto a lo que Oliver suele ser.
El viaje a Hub City, nos deja una bonita contienda entre el deseo de que la justicia prevalezca, como marca Oliver y el deseo de venganza sin compasión contra Sirus, (el malhechor que asesinó a su amante y compañero policía), que es lo que se desea Dinah por encima de todo y que afectada por la explosión del acelerador de partículas la ha convertido en una meta-humana tremendamente poderosa...pero lo que no sabe es que la persona sobre la que busca venganza, también fue afectada por la explosión, con lo que el duelo entre metas, es inevitable y bastante llamativo, aunque tal y como veremos, el bueno de Curtis al más puro estilo Cisco, conseguirá un artefacto que bloquee los poderes de Sirus, pero ésto acarreará que Dinah pueda matarlo con facilidad, sin que Oliver pueda hacer nada.
Llámenlo remordimientos o lo que sea, pero la meta humana, irá en busca de nuestro señor Queen y aceptará formar parte de nuestro querido equipo, ya que la venganza consumada, no ha tenido el efecto que ella pensaba.
En resumen, la serie nos sigue dando alegrías, la mejora en esta quinta temporada ha sido espectacular y las peleas cada vez está mejor rodadas y mejor coreografiadas y por cierto, Felicity ha conseguido lo necesario para liberar a John, pero además ha conseguido a "Pandora" y con ese nombre...ya sabemos que nada bueno puede venir
Todo se desata con el rapto del agente Koening, por parte de Watchdogs y la razón es que él tiene en su poder el conocimiento de donde se halla el "Darkhold".
El doctor Radcliffe le mapea el cerebro para hallar su ubicación y lo que descubre no es ni más ni menos que no hay un sólo Koening, sino que son varios hermanos y que el lugar donde se halla "Darkhold" es conocido como el "Laberinto", una especie de biblioteca de SHIELD, donde ocultan muchos de sus secretos.
Y aquí es donde tenemos lo mejor del episodio: por fin Coulson descubrirá lo que sospechaba, que May no es May, sino un robot diseñado por Radcliffe ( sin duda el momento beso, fue el detonate) y que Radcliffe lo que ha hecho es engañarles para apoderarse de Darkhold...pero lo que no saben, es que al leer Aida dicho libro, hizo posible que los robots creados por Radcliffe tuviesen cerebro tal y como Fitz y Simmons comprueban al inspeccionar a la copia de Radcliffe. Un cerebro como el nuestro pero con mayor capacidad, con lo que las posibilidades que se le abren con Darkhold en su poder, son infinitas y más si tiene a Aida por en medio.
Lo que se abre ahora, es una búsqueda desesperada y contrarreloj por parte de nuestros agentes para descubrir el paradero de May y de otra parte Coulson deberá andarse con cuidado, porque se ha convertido en el objetivo principal de Watchdogs, ya que su cabecilla piensa que es el responsable de que los Chitauri, los Kree y los Inhumanos hallan llegado a la Tierra.
Por lo tanto, que huele a que vamos a tener muchos buenos momentos de acción y con ganas de ver que nos depara la semana que viene el nuevo episodio.
Por José María Molano
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