Tras 2 años despues de que se estrenase el galardonado documental Citizenfour, la historia de Snowden vuelve a ser contada, esta vez de la mano de Oliver Stone, quien es cierto que ya no es lo que era pero aún sigue estrenado trabajos menores pero interesantes, como el caso de Snowden.
Aunque por lo general conocemos bien la historia de Snowden, el mayor acierto de la cinta es el enseñarnos todo el transcurso del personaje desde que se alistó en el ejército y posteriormente en la CIA hasta que filtró los documentos en 2013. En ese aspecto el montaje es bastante notable, y dinámico estableciendo la narrativa actual en la habitación de un hotel en Tokio la noche que Snowden y sus aliados filtraron los documentos y saltando constantemente en el tiempo para ir narrando la etapa de Snowden dentro de los organismos gubernamentales
Por otro lado Snowden resulta demasiado evidente y superficial en su crítica y mensaje sobre la privacidad de los habitantes de USA y prácticamente de todo el mundo. Es decir, ciertas escenas como en las que se nos enseña el funcionamiento de un programa que espia literalmente todo lo que existe en el mundo Online o una en la que Snowden nos cuenta como la NSA llega a pinchar los servidores de prácticamente todo el mundo, resultan tremendamente intetesantes y reveladoras pero la pelicula falla a la hora de querer profundizar en ese mensaje ya que o resulta algo pobre o ya lo hemos visto en más peliculas tratado de manera más completa. La pelicula opta más por centrarse en Snowden como personaje y en su historia que adentrarse en terrenos más políticos y sociales.
En torno al cast, en general esta bastante entregado destacando sobre todo a Joseph Gordon-Levitt. Aparte de que el parecido físico es prácticamente idéntico, Levitt (como ya hizo en la recomendable El Desafio) clava el acento y gestos de Snowden de manera que a veces te olvidade que estas viendo a un actor. La segunda mejor del reparto la encontramos en la infravalorada Shaeline Woodley quien destaca como el mayor pilar emocional de Snowden en la historia. Los secundarios por otro lado cumplen sin más su papel, destacando más quizás a Zachary Quinto y Melissa Leo ya que por ejemplo la participación de Tom Wilkinson resulta poco más que momentanea. Quizás lo más negativo de Snowden sea su extensa duración, ya que aunque para lo que cuenta bien necesita dos horas al menos, en la pelicula sobran casi unos 20 minutos de escenas que aportan entre poco y nada. Aún asi la pelicula tiene un buen ritmo, gracias a los continuos saltos temporales
Snowden es un biopic interesante, realmente efectivo y con un Joseph Gordon Levitt muy entregado a su papel pero resulta algo obvio en el mensaje que quiere transmitir. Por lo tanto aún suponiendo un trabajo menor en la filmografia de Oliver Stone merece la pena echarla un vistazo sobretodo por observar el declive de Snowden en su arriesgafa lucha hacia la verdad
Nota: 6,5/10
Por @Fasspittewan
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