El pasado lunes 29 de agosto tuve el placer de ser invitado a ver la película "Don't Breathe" o "No Respires" en la genial sala de proyecciones de Sony en Madrid. Habiendo visto solo un trailer de la misma, el cual me pareció curioso, me aventuré a ver otra película película de miedo sin prejuicio alguno, pero con el constante recuerdo del mal rumbo que está tomando el género para mi gusto personal. Y la verdad es que a grandes rasgos la película me gustó.
"No Respires" es una cinta de terror/suspense que nos presenta a tres amigos que, gracias a tener acceso a las llaves y códigos de alarmas de varias casas de la zona, se dedican a realizar robos a pequeña escala. Tras un soplo, acabarán entrando a la casa de un ex-militar ciego que supuestamente guarda una gran suma de dinero, la suficiente como para que esta sea su última incursión, la que les permita escapar a una mejor vida. Y esto es todo lo que puedo contar sin cabrear a nadie. De este modo, empezaré diciendo que la película funciona. Desde la primera escena (la cual, aislada, resulta un poco confusa) se nos promete que vamos a ver un film tenso, que mantiene aferrado a la silla y con la mirada en la pantalla al espectador, y cumple con ello. La historia es sencilla de comprender y con pocas imágenes conocemos ya todas las explicaciones necesarias para adentrarse en la trama, por ello no se detiene a explicar cada detalle que luego olvidaremos, teniendo así un comienzo correcto, fluido sin llegar a ser demasiado abrupto, no deja lugar al desconcierto. No obstante este buen ritmo inicial jugará en ocasiones en su propia contra, ya que algunas secuencias posteriores llegan a ser un poco lentas, hasta que a partir de cierto punto la película continua casi sin pausa. Quizá por esto mismo también el final se atraganta un poco, y puede llegar a verse algo rebuscado o delicado en cuanto a la estabilidad de la historia, pero no llegando a ser forzado. Al fin y al cabo es parte de su carácter y de el del género el continuar cuando todo parece haber terminado.
La dirección, a manos de Fede Álvarez, hace justicia a la historia y ayuda mucho al público a la hora de sumergirse en la trama y la tensión. Debido a la mecánica del metraje, que incluye a un personaje ciego, se podría haber abordado de dos formas. Una hubiera sido centrarse en la situación de ese personaje, experimentando un miedo más psicológico a través de fundidos a negro llenos sonidos desagradables y aterradores, como es el caso de "Hush", una cinta del mismo género y con una premisa similar que contiene un personaje principal con sordera. Pero tenemos delante al director "Evil Dead" o "Posesión Infernal", y no estaría bien apartarle de lo que a él se le da bien, la violencia visual, lo grotesco, imágenes explícitas. Antes de dejarte averiguar como pueden desarrollarse los eventos con planos rápidos y poco concretos, te lo muestra, de modo que esa tensión ya ha sido creada. Y como he dicho antes, funciona. ¿Hubiera sido mejor el otro método? No lo sé, pero desde luego no se trataría de la misma película. Sí es cierto que me hubiera gustado algo más de juego con el personaje ciego, ya que lo poco que hay me agradó, pero no me voy a quejar. Además, me gustó más que "Hush", todo sea dicho.
Sin embargo, hay varias cosas que no me han gustado de la película que hacen que no termine de ser lo que llevo ya tiempo buscando en este género. Una de ellas es que la capacidad de la historia para avanzar se basa en la conveniencia, es decir, los eventos suceden de forma que puedan desencadenar en otros eventos, por ejemplo (ajeno a la película): un disparo que pretendía impactar en uno de los personajes acaba impactando en una ventana, de modo que esta se rompe creando así una vía de escape. Sé lo que vais a decir, y es cierto, no solo es un mecanismo (por no llamarlo cliché) en este tipo de películas, sino que se usa en todo tipo de historias. Pero ya no me estoy refiriendo solo a que haya un armario con la puerta abierta que permita a alguien esconderse, o decisiones estúpidas que alarguen la tensión (no preguntes si hay alguien en casa, ¡$¿*€%!). A lo largo de la película vemos a personas humanas al borde de la muerte y que deberían tener serias lesiones hacer cosas que a mi parecer son imposibles, y todo para producir más minutos. Esto no ocurre continuamente pero contribuye a mi pensamiento ya dicho de que el final se note engordado. Añadir también que las capacidades auditivas del ciego varían según le da la gana, escuchando en ocasiones sonidos casi imperceptibles pero dejando pasar por alto las conversaciones en "voz baja" de otros personajes. Por otro lado me gustaría haber podido conocer algo más de los personaje, los cuales se quedan o bien planos o confusos, como el de Rocky, que no deja nada claras sus ambiciones respecto al dinero que gana.
En resumen, la película es entretenida y cumple con lo prometido. Da un empujón al género que quizás no termina de ser tan intenso como se pretendía, pero que pone, o más bien repone unas bases para futuras entregas de este estilo.
Diego Gozalo Pascual/@DieGozalo97
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